Como hacer la salsa mas espesa

Cómo espesar una salsa
Si está intentando comer un poco más sano, lo más probable es que cocine más en casa. Y aunque puede ser divertido probar nuevas recetas, también puede ser abrumador y confuso cuando intentas hacer cambios más saludables en algunas recetas tradicionales. Una de las más complicadas son sin duda las salsas. Tanto si quieres eliminar el gluten como si simplemente quieres encontrar formas más sanas de espesar las salsas, hay un montón de cambios fáciles que puedes empezar a hacer ahora mismo.
La maicena es probablemente la forma más común de espesar salsas sin harina. Es fácil de conseguir en las tiendas de comestibles, es fácil de usar y sólo necesita la mitad de la cantidad que necesitaría si usara harina normal. Basta con disolver una o dos cucharadas en el agua antes de añadirla a la salsa, y luego ponerla a fuego lento mientras se bate hasta que se espese. Sin embargo, si está tratando de evitar los granos, esta podría no ser la mejor opción para usted.
La gelatina es un agente espesante de origen animal que se utiliza sobre todo en recetas como las tartas de queso no horneadas, los pasteles u otros postres de crema pastelera para ayudar a que se cuajen. También puede utilizarse para espesar salsas disolviéndola en un poco de agua antes de añadirla a la salsa. La gelatina puede tardar en espesar, así que hay que tener paciencia antes de añadir más.
Espesar la salsa con harina
Espesar una salsa puede ser molesto, frustrante y engorroso. Sin embargo, hay varias formas de resolver los problemas de espesamiento de las salsas, dependiendo de tus requisitos dietéticos, del tipo de plato y del tiempo que tengas para hacerlo. Yo utilizo los 6 métodos siguientes para espesar las salsas y mi elección suele depender del plato que esté preparando y de los ingredientes que tenga a mano.
La mantequilla se derrite hasta que burbujea y entonces se añade la harina y se remueve mientras se calienta hasta que parezca arena mojada. En este punto se puede añadir líquido caliente o frío y se bate la base del roux en la salsa. Se puede añadir líquido a la olla o raspar el roux en un líquido caliente en otra olla. Si el líquido ya está caliente, el espesamiento es más rápido. Si el roux se cuece en un líquido frío, tendrá que hervir a fuego lento y batir constantemente. El uso de un roux hará que la salsa se vuelva opaca, por lo que no conviene a las salsas que deben ser claras. Bata la salsa espesada con roux a fuego alto hasta que empiece a hervir y déjela hervir durante 1 minuto o hasta que haya alcanzado la textura deseada.
Cómo espesar la salsa con maicena
La maicena es un agente espesante habitual en las artes culinarias, pero si la añades directamente al líquido que quieres espesar, se apelmazará. Para espesar una salsa o una sopa con maicena, primero hay que hacer una papilla, que es una mezcla de partes iguales de maicena y líquido (normalmente agua, caldo o vino). Es importante hacer la papilla con el líquido frío, y luego añadir la papilla a la salsa que se está cociendo a fuego lento.
Las moléculas de la maicena son como pequeñas esponjas. Absorben el agua y se expanden al hacerlo. Lo mismo ocurre con cualquier almidón. Es la misma forma en que el arroz, la avena o la polenta se espesan y aumentan de volumen cuando se cocinan a fuego lento.
La maicena confiere un brillo a los líquidos que espesa, por lo que suele utilizarse más en salsas dulces y rellenos de tartas que en salsas saladas y salsas. Aun así, funciona muy bien y es fácil de usar:
Algo que hay que recordar cuando se utiliza la maicena: Si tu salsa es bastante ácida (por ejemplo, a base de tomate), el ácido hará que la maicena pierda parte de su eficacia como espesante. En ese caso, puedes sustituirla por arrurruz o almidón de tapioca. Estas dos alternativas también son mejores opciones si lo que estás preparando es algo que piensas congelar, porque la maicena puede adquirir una textura esponjosa cuando se congela. Por el contrario, no utilices el arrurruz para espesar una salsa a base de nata o leche, ya que el arrurruz combinado con la leche puede resultar un poco viscoso.
Cómo espesar una salsa sin maicena
Tanto si preparas una salsa para la cena de Acción de Gracias, como si preparas una salsa elegante para acompañar esa cena de bistec o intentas hacer una auténtica pasta a la carbonara, todas ellas tienen algo en común: la salsa. Y aunque no hay dos salsas exactamente iguales, siempre son mejores cuando son espesas, brillantes y deliciosas. (Vamos, nadie quiere una salsa de pasta aguada o una salsa blanda).
Para conseguir esa consistencia perfecta, tendrás que saber qué ingrediente es el adecuado para lo que estás haciendo, además de cómo utilizarlo para obtener los mejores resultados. A continuación te explicamos cómo espesar la salsa de siete maneras sencillas, independientemente de lo que estés preparando.
Por qué funciona: El almidón de maíz es un recurso para espesar la salsa por una buena razón: es ampliamente disponible, barato, sin sabor y muy eficaz para espesar, incluso en pequeñas cantidades. Además, cuando se calienta, la mezcla es translúcida (por lo que a veces se prefiere a la harina). El almidón de maíz es un tipo de carbohidrato que proviene de los granos de maíz. Cuando se mezcla con líquido y se calienta, se vuelve gelatinoso y espeso.